Ayer dije
que si todo salia bien escribiría y sí, me toca escribir desde la
alegría y el desahogo.
Todo
empezó en mis primeros campas, el debate de esa tarde era sobre
feminismo y opresión patriarcal, el tema daba para mucho y siguió
en la cena. ¿Por que a nosotras nos “enseñaban” a no ser
violadas y no los enseñaban a ellos a no violar? Fue entonces cuando
una compañera de Cataluña me habló del no solo duelen los golpes y
de Pamela Palenciano.
Los
campas acabaron y en esa vuelta a la realidad busqué el taller, un
taller que no esperaba que me calara tan hondo y que me ayudó a no
culparme.
Ayer, por
fin, pude ver ese taller en vivo y en directo, desde muy cerca y
entre muchas lágrimas que, en su mayoría, eran de emoción y
alegría. Un no solo duelen los golpes que me marcará aun más y un
abrazo final que nunca olvidaré. Durante todo el “proceso” ha
habido personas que han sido verdaderos pilares, y a ella también
tenía que darle las gracias. Las palabras dejan una marca mayor, “a
cada acción se sigue una reacción” nos decía ayer, y esas
reacciones tardan en sanar.
Ya he
hablado de este taller antes, es sencillamente genial, entre el
teatro, las bromas y una cruda historia, Pamela explica su pasada
experiencia. Esos tacones que nos presentan como escalafón dentro de
nuestro crecimiento. La diferente reacción de una niña frente a la
regañina de su madre y de su padre, o del alumnado ante una
profesora o un profesor. El “te has llevado a la mejor del pueblo”
que refleja que parecemos ser un simple premio de feria o el acoso
callejero tan difícil de frenar y para el que esta gran mujer nos
aconseja sacarnos un moco.
Demasiada
diferencia aprendida por simples estereotipos. Diferencia que nos
divide en dos mundos, el rosa y el azul, con reglas y potencialidades
diferentes en función de lo que encontremos entre nuestras piernas.
Diferencias que dentro de una relación hacen que te creas la propia
mentira del “todo va bien”, “todo va a cambiar” o “tras la
reconciliación viene lo mejor”. Una realidad a la que combatir día
a día desde la pequeña acción o desde la grande si existen los
medios necesarios, desde dentro si nos toca, pero desde fuera
siempre.
Un volver
a vivir, un abrazo y un nuevo detalle para mi próximo tatuaje :D