El
maltrato es una lacra que, como ya he dicho en anteriores entradas,
se arrastra a lo largo de la historia gracias a la hegemonía del
patriarcado aún presente.
Este problema, gracias a las nuevas
medidas del Partido Popular no va a acabar o, ni tan siquiera, a
reducirse, todo lo contrario, aumentará de forma desmesurada en las
próximos meses.
Son
miles los abusos que sufren a cada minuto mujeres alrededor del
mundo, y de esos miles, solo unos cuantos conllevan alguna represalia
para aquella persona que ejerce este tipo de violencia. Por ello, el
gobierno del PP ha decidido que en las estadísticas no contarán
como casos de violencia machista aquellos que no hayan requerido de
una hospitalización de, al menos, 24 horas. De esta forma, maltrato
psicológico o agresiones que dejen secuelas “leves” (heridas,
fracturas...) no quedarán registradas como violencia de género.
Esto
hará que se pierda aún más el miedo a pegarle a una mujer, ya que,
su defensa se verá reducida.
El
Partido Popular, como podemos ver, sigue con sus medidas
patriarcales, represivas y de sumisión contra el género femenino.
Parece ser que a la derecha ultra-católica las heridas, físicas o
psíquicas, se las cura su dios a base de rezos, mientras que a las
mujeres que luchan con acabar con la sumisión “les está bien
merecida una paliza de vez en cuando”.
#YoNoFuiHospitalizada
#TodasContamos.
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