miércoles, 27 de agosto de 2014

Podemos - ¿Qué falta y qué sobra?

          He escrito varias veces sobre Podemos, participo en la iniciativa desde su creación y me gusta por la capacidad concienciación, sensibilización, empoderamiento... que tiene, porque ha sido capaz de agrupar a gente diversa, dentro de un marco de izquierdas, y porque ha sido capaz de acercar a la política a gente que estaba asqueada de ella.

         Pero no todo son simpatías y no todo lo que hace o dice Podemos me gusta, para nada. Suelo ser crítica con lo que pienso y antes de que alguien me tire de la oreja, o de los pelos, toca decir lo que a mi modo de ver le falta, o le sobra, a esta iniciativa.

         Podemos nace como una iniciativa que trata de agrupar a mucha gente con unas lineas básicas, auditoria de la deuda, defensa de lo público, crítica y rechazo a las políticas neoliberales... El discurso es concreto y el proyecto arranca más que de sobra obteniendo 5 eurodiputadxs en solo cuatro meses de vida. Todo un logro sin precedentes y una sorpresa que pocas esperábamos.

         Listas abiertas para esa candidatura a las europeas, gente poco conocida y Pablo, cabeza visible desde el primer momento por su implantación mediática y su arte en el debate contra rancios como Maruhenda. El tío sabe defenderse y callar de maravilla, eso no lo vamos a discutir, sobre su discurso si hablaré ahora... Lista cerrada con más de 33.000 participantes en su elección, obviamente como número uno aparece Pablo, gracias a la ventaja con la que parte y a la desventaja de lxs demás a pesar de poder tener discursos que seguro nos gustaban más. Por lo tanto, lo que la tele ayuda por un lado, entorpece por el otro, haciendo que lxs jugadorxs comiencen con reglas diferentes.

         Arrancan los círculos y comienzan a multiplicarse por todo el Estado, y por parte del extranjero, cada día suman a más gente, desde mi punto de vista es innegable el trabajo de Izquierda Anticapitalista en todo el proceso, pero aun más en esta fase, en la que ayudan a que mucha más gente se interese por el proyecto y comience a empoderarse políticamente.

         La cosa se acelera aun más tras las elecciones, y se comienza a hablar de la asamblea de otoño o asamblea “sí se puede”. En esta se decidirán las bases políticas de Podemos y para comenzar a redactar documentos se crean dos listas. La ciudadanía, una vez más, puede “elegir”. Una lista sin ninguna persona reconocida mediaticamente, es decir, la lista avalada por el Círculo de Enfermería y la lista que es elegida finalmente, con Pablo a la cabeza. Comienza la redacción. Compromiso ético, documento político y principios organizativos. Cada ccírculo y persona puede proponer las modificaciones que crea convenientes sobre estos documentos y en la asamblea de otoño se decidirán y asentarán las bases.

         El fenómeno de Podemos ha acercado a mucha gente. Ha conseguido llenar el vacío político del descontento general. Ante un PP que cada vez tira más a la derecha, que privatiza, legisla como quiere e intenta mandar en donde no debe, que se carga aun más la educación, la sanidad o los derechos laborales, que no resuelve los problemas de desempleo y que poco mejora la vida de las personas, además de seguir reprimiendo duramente las luchas sociales mientras mantiene en un pedestal los beneficios de la derecha. Un PSOE que cada vez engaña menos, al que le sobran siglas porque ni socialista ni mucho menos obrero l representan, y que ya no se ve como solución a pesar de su lavado de cara a base de Susana Diaz y Pedro Sanchez. Una Izquierda Unida que tampoco llega a calar en la gente y a la que, para mi, ha hecho mucho daño el pacto con la PSOE en Andalucía, donde ha sido cómplice de recortes y despidos. Un bipartidismo a la baja y una izquierda que no da respuesta hacen que el vacío del descontento y la no representatividad sea llenado por un proyecto como Podemos. Un proyecto reformista sin lugar a dudas que hasta ahora ha apostado poco por la movilización, esperemos que por la falta de “experiencia” y el poco recorrido que ha tenido hasta ahora, y un proyecto al que, para mi, le sigue faltando participación ciudadana, cosa que espero se solucione tras la asamblea de otoño, en la que espero que los círculos puedan decidir de verdad.

         Por otro lado encuentro en Podemos el problema del lenguaje. Hasta hoy en los medios no salen los círculos por lo que lo poco que podemos escuchar ahí sobre el proyecto nos viene encabezado por Pablo Iglesias en su mayoría, y en parte, por el resto de eurodiputadxs de la organización y de los amigos cercanos a Pablo, ya sea Monedero o Errejón. Esto hace que muchas veces se distorsionen las opiniones personales con las opiniones de Podemos.

         El “ni de izquierdas ni de derechas” o el patriotismo que ahora algunos tratan de traer hacia la izquierda, no nos gusta a todxs, hay una gran cantidad de personas que no comulgan con estas ideas, que por otra parte son bien acogidas por algunos sectores de la derecha neonazi más rancia que trata de abrirse paso a base de dialogo populista y “cercano”. Su ni de izquierdas ni de derechas se basa en que hay cosas que han de ser públicas (cosa que históricamente defiende la izquierda) pero que dentro de ese públicas solo han de ser para lxs nacionales (cosa que suena a más de extrema derecha que a otra cosa). Algunxs nazis dicen: “yo no soy ni de izquierdas ni de derechas, soy racista”, pero otro son más sutiles y si llegan a acercar gente, para ejemplo de actualidad solo hay que leer lo siguiente: “La revolución empieza en los barrios, en la conciencia de cada hombre y de cada mujer que lucha por defender los derechos de quien no tiene un techo digno, de quien no puede dar de comer a su familia, de quien sufre la avaricia de banqueros usureros y el egoísmo de políticos corruptos” (1), y ¿de donde sale este comunicado? Ni más ni menos que de la nueva okupa nazi que hay en Madrid, concretamente, en el barrio de Tetuán, quienes dicen no ser ni de izquierdas ni de derechas, patriotas y punto.

         Es por ello que encuentro un gran problema en el lenguaje que usa Podemos, entiendo que el ni izquierdas ni derechas se ha podido usar como un intento de no “asustar” a nadie, prefiriendo hablar de justicia social, pero históricamente, esta justicia solo la ha defendido la izquierda, por lo que, como Teresa Rodríguez le respondía a Pablo al escucharlo decir tal barbaridad: “a mi me duele la boca si no digo que soy de izquierdas”. Creo que ya se ha acercado a gente y que por tanto toca seguir avanzando por lo que el discurso también tendría que tornarse un poco más real, hablar de “casta y ciudadanía” puede ser muy divertido para algunxs, pero otrxs pensamos que va siendo hora de aterrizar y hablar claro, que ya sabemos que de Podemos no va a salir la revolución, eso está claro, pero si se trata de concienciar y empoderar prefiero que el discurso se contextualice un pelín más y para que esa gente que se acerca pueda comenzar a ponerle cara a lo que es “casta” y a lo que es “ciudadanía”, que los discursos poco concretos dan lugar a demasiados errores.

        Por otro lado tampoco entiendo el empeño por recuperar el “patriotismo de izquierdas”, más aun, si este no representa los intereses de todos los pueblos que configuran nuestro estado, creo que tenemos una historia que delata quienes han sido lxs defensorxs de este durante muchos años, historia que ha pisado a otrxs muchxs y que aun mantiene en cunetas a cientos, por lo que no me veo denominándome patriota de ninguna parte.

         Es cierto que hay cosas que no me gustan, cosas que no me representan para nada, y que ahora mismo puede haber caos en algunos círculos, Podemos arranca como una amenaza para muchxs, pero, sobretodo, tras los resultados de las europeas, la cosa cambia y, lo que antes era visto como una amenaza, ahora pasa a ser una oportunidad para quienes tienen fines que poco tienen que ver con participación, transparencia o llegar a más gente. Aun así creo que el proyecto, si sigue por buen camino y recoge las necesidades de las personas y los círculos, podrá llegar a alguna parte. Sigo con mis dudas sobre las municipales, muy en parte por la realidad que me pilla más cerca, pero una cosa está clara, a pesar de que las ideas y propuestas fueran maravillosas la batalla contra el capitalismo y el desmantelamiento de servicios sociales, laborales... así como todos los abusos que estamos recibiendo no acabaran con la entrada a las instituciones.

         La lucha debe seguir en la calle, por lo que para mí, sigue siendo más importante hacer que la gente se interese, empodere y participe en política con conciencia de clase, que ganar unas elecciones.

PD: se que como análisis se puede quedar corto pero ya he escrito mucho, si alguien quiere plantearme algo responderé por aquí, por correo (abcakmx@gamil.com) o en persona.

(1) Recuperado de: http://goo.gl/p2Lgfx

martes, 12 de agosto de 2014

31º Campamento Internacional de Jóvenes Revolucionarixs


          Tras el golpe de volver a la realidad y en plena resaca post campa, toca hacer la valoración de esta experiencia y aplicar todo lo aprendido a nuestro día a día.

         El 31º Campamento Internacional de Jóvenes Revolucionarixs acaba, este año hemos estado en Commentry (Francia), 410 compañeras de todo el mundo unidas para debatir y seguir construyendo de forma internacional ese proyecto que tanto anhelamos. Y es que en el día a día muchas veces creemos eso que tanto nos dicen, que nuestras ideas son solo fantasía, pero en campas como este volvemos a sacar en claro que no estamos locas, que lo que defendemos es algo real, algo justo que defienden también muchas otras personas en todo el mundo y algo, que tarde o temprano, y aun sabiendo que muchas no veremos, llegará.

         Es cierto que los campas son un mundo a parte, un mundo que se acerca muy mucho a nuestra utopía.

          Ahora toca volver a abrir la libreta llena de notas y apuntes... las revoluciones árabes, la experiencia de Omnia Sunt Communia en Italia, la huelga de lxs carteros en Francia, el papel de los sindicatos, Palestina, el análisis de la crisis actual, la Unión Europea, feminismo y antifascismo, represión, teoría queer, estrategias... mil temas vistos desde ángulos muy diferentes pero que se siguen resumiendo en una lucha de clases, en la que, a nosotrxs, no nos queda otra que que seguir resistiendo y ganar terreno.

          Es cierto que la política lo impregnaba todo, las fiestas y los momentos de folclore gastando intifadas en el bar también lo estaban, pero hay que reconocer que la gente de la cuarta sabe pasarlo realmente bien, ya sea en la fiesta de las mujeres o LGTBIQ o durante la mayor tormenta que nos podamos imaginar . Las interdelegaciones formales y planificadas arrancaban debates que solían acabar con una cerveza de por medio, y ya fuera a las 3 de la tarde o a las 5 de la madrugada siempre había alguien con ganas de preguntar sobre Podemos.

          En resumen, experiencia más que positiva, aunque hemos echado en falta a algunxs compas, el reencuentro con otrxs muchxs ha sido genial. Ponernos al día sobre la situación de Izquierda Anticapitalista, las luchas en todo el estado y en los diferentes países que han participado en estos campas, más aun tras las europeas que han dejado sorpresas y sustos en muchos lugares, ha sido algo grandioso.

         Ahora nos toca descansar, estamos a un mes y medio del nuevo curso político, donde el sindicalismo estudiantil y el movimiento feminista y de anti-represión deben seguir en auge y donde nos tocará más que nunca dejarnos la garganta y lo que sea necesario para defender lo que nos pertenece.

        El año que viene el camino será hasta Bélgica :)