Mire a donde mire me siento desolada,
veo como compañerxs día a día se cargan y sobrecargan de trabajo
por mejorar nuestras condiciones de vida y por mantener y aumentar
los derechos que nos pertenecen por el mero echo de existir mientras
se ven, incluso, menospreciadxs por una sociedad pasiva que no grita
hasta que ve que ese es el último recurso que tiene.
La educación, el pilar más importante
de la sociedad y del pueblo muere un poquito más cada día. Padres y
madres que no pueden pagar los libros, comedor, transporte o ropa a
sus hijxs para que vayan al colegio... universitarixs que sin beca se
ven obligadxs a dejar sus estudios, compañerxs que trabajan por unos
míseros cuatro euros la hora haciendo que estar explotado sea todo
un privilegio, bancos cada vez más ricos, empresarixs cada vez más
poderosxs, un gobierno que solo escucha lo que sale de su propia
boca, y a veces, ni eso... sustentamos día a día a muchxs que viven
del cuento. No son paradxs, ni dependientes, nada que ver con ellxs,
son monarquía, iglesia, políticxs, ministrxs... son una lacra, una
lacra que nos pisa y nos revienta mientras, muchxs, confían en ellxs
o miran hacía otro lado. Mientras que acusan sin ningún sentido o
coherencia al que lucha por su futuro, por el futuro de todxs, por un
futuro más justo, porque esto señorxs, esto no es justo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario