Vivimos en un mundo...

     Vivimos en un mundo en el que nos enseñan a estar sometidos, nos educan para callar y nos venden la "reducación" como una patraña encasillada entre cuatro paredes en las que encierran a personas que se rebelan contra ello.

     Vivimos en un mundo en el que el que asesina y mata poco a poco al pueblo lo hace con el único fin de competir, sacando un beneficio mayor que la persona que tiene junto a ella y llevándose por delante a otras tantas mientras les repite una y otra vez que la culpa de sus desgracias es de ellxs mimxs.

     Vivimos en un mundo en el que la apariencia cuenta mucho más que la honradez. En el que ser bellx es una obligación y tu “carta de presentación” ante cualquier necesidad.

     Vivimos en un mundo en el que el medio ambiente se destruye a cada segundo para aumentar ciudades ya inmensas o crear otras nuevas sin pensar en las consecuencias que ello acarrea.

     Vivimos en un mundo en el que lo importante es el tamaño, la casa, el coche, la empresa, el tacón, el maletín, los pechos y el pene cuanto más grandes mejor, mientras que la cintura no puede medir más que el grosor de un macarrón.

     Vivimos en un mundo en el que es mejor callar y asentir que llevar la contraria a alguien que tenga diez euros más en el banco que tu.

     Vivimos en un mundo que no es un mundo, que es un estercolero de personas e ideales desechos por el capitalismo.